Neko

lunes, octubre 24, 2005

Ups, fuera de servicio

Bueno, tuvimos un problema, la conexión a internet (único contacto con el mundo exterior además del ventanuco secreto por el que nos pasa comida mi abuelita) se nos cayó toooodo el fin de semana.
Nos dimos cuenta ayer de que eran las elecciones y mandamos un mail al ministerio del interior para ver si podíamos votar desde acá, con todo esto de probar el voto electrónico y qué se yo. Pero no nos respondieron. Igual, "Unión de Ultraderecha" no sacó muchos votos, no hubiéramos logrado nada sumándoles los nuestros. Yo no se qué tiene la gente en la cabeza. Por suerte ganó Macri y no uno de esos comunardos, que siempre son potenciales peligros. De todas maneras eso de ponerse "Pro" como nombre de lista viste... No sé, capaz que el tipo nos está engañando y piensa impulsar el control de empresas privadas y la reducción de impuestos regresivos y la reforma agraria y la mar en coche. Hay que tener cuidado. Yo no porque estoy acá abajo y no planeo salir pero ustedes que están ahí arriba respaldando el sistema, estén atentos y defiendan su derecho a un congreso como la gente, recto y decente y sin "deslices".
Bueno me voy a poner a leer un libro acerca de arquitectura subterránea y otro de diseño de interiores porque al cuarto le faltan algunos detalles. Claro, con el apuro de entrar ni nos fijamos, pero después de unos días empezamos a pensar que las paredes son un poco inestables. Además no sabemos si pasará algun arroyo subterráneo por acá cerca, puede ser por eso que se humedeció la pared de atrás de mi cama. Es que para abaratar costos pusimos concreto de 3 lados nomás. No queda tan mal el estilo rústico, pero bueno, va a haber que buscarle la vuelta.
Abuelita, si estás leyendo esto, se nos acabó la ración de pochoclo para microondas. Nico está empezando a razguñar las paredes, tengo miedo de que quiera salir, la aislación del mundo exterior no le hace bien, siempre fue demasiado sociable. Pasá en cuanto puedas.

1 Comments:

Anonymous Anónimo dijo entre hipos...

La verdad es que hay que tener cuidado... aun cuando uno mismo puede resguardarse bajo tierra y alejarse de los peligros humanos del mundo, nuestra abuelita, que sigue allí afuera, puede sufrir en cualquier momento algún suceso inesperado que le impida entregarnos la comida por días, semanas, tal vez hasta meses... o quizás nunca regrese. El día que nuestras abuelitas esten tan bajo tierra como nosotros... ¡etamo' frito', muchacho'!

mar oct 25, 04:37:00 p. m.  

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